miércoles, 6 de febrero de 2013

MARY SHELLEY: FRANKENSTEIN



            Una lúgubre noche de noviembre vi coronados mis esfuerzos. Con una ansiedad casi rayana en la agonía, dispuse al alcance de mi mano el instrumental capaz de infundir la chispa vital al ser inerte que yacía ante mí. Era ya la una de la madrugada; la lluvia golpeteaba triste contra los cristales, y la vela estaba a punto de consumirse, cuando, al parpadeo de la llama medio extinguida, vi abrirse los ojos amarillento y apagados de la criatura. Respiró con dificultad, y un movimiento convulsivo agitó sus miembros.
         ¡Cómo expresar mis emociones ante aquella catástrofe o describir al desdichado que con tan infinitos trabajos y cuidados me había esforzado en crear! Sus miembros eran proporcionados, y había seleccionado unos rasgos hermosos para él. ¡Hermosos…! ¡Dios mío! Su piel amarillenta apenas cubría la red de músculos y arterias; su cabello era negro, largo y brillante; los dientes tenían la blancura de la perla; pero estos detalles no hacían sino contrastar espantosamente con sus ojos aguanosos, que parecían casi del mismo color blancuzco que las cuencas que los alojaban, con la piel apergaminada y los labios finos y negros.



It was already one in the morning; the rain pattered dismally against the panes, and my candle was nearly burnt-out, when, by the glimmer of the half-extinguished light, I saw the dull yellow eye of the creature open; it breathed hard, anda convulsive motion agitated its limbs.


Capítulo/Chapter V


Editorial Vicens-Vives.





¿sería este su primer crimen? ¡Ay! ¡Yo había echado al mundo a un miserable depravado que se complacía en el asesinato y el sufrimiento de los demás! ¿Acaso no había matado él a mi hermano?
Capítulo VII




En todas partes veo la felicidad, de la que sólo yo me encuentro irrevocablemente excluido. Yo era afectuoso y bueno, y la aflicción me ha convertido en demonio. Haz que sea feliz, y volveré a ser virtuoso.
(…)
Créeme, Frankenstein; yo era benévolo; mi alma resplandecía de amor y humanidad, pero estoy solo, miserablemente solo. Si tú, mi creador, me detestas, ¿qué me cabe esperar de tus semejantes, que no me deben nada? Me desprecian y me odian. (…) Si la humanidad conociese mi existencia, haría como tú: se armaría para destruirme.

 

“Abhorred monster!” Fiend that thou art! The tortures of hell are too mild a vengance for thy crimes. Wretched devil! You reproach me with your creation, come on, then, that I may extinguish the spart which I so negligently bestowed.”


You, my creator, abhor me; what hope can I gather from your fellow creatures, who own me nothing? They spurn and hate me.

Capítulo/Chapter X




-Debes crear una mujer para mí –prosiguió-, con la que pueda intercambiar los afectos necesarios para mi existencia. Sólo tú puedes hacerlo, y te lo exijo como un derecho que no  puedes negarte a concederme.
(…)
¿Crear otro ser como tú, para que vuestra maldad unida pueda desolar al mundo? ¡Vete! Te lo repito: puedes torturarme, pero jamás accederé.

Capítulo XVII



Ahora estaba a punto de crear otro ser cuyas inclinaciones ignoraba igualmente; y esta mujer podía llegar a ser mil veces más malvada que su compañero, y disfrutar con el crimen y la desdicha ajena.
(…)
-¿Por qué cada hombre –exclamó- puede tener una esposa para su lecho, y cada bestia una compañera, y yo debo vivir en soledad?
(…)
Los restos de la criatura inacabada que había destruido yacían esparcidos por el suelo, casi me pareció como si hubiese despedazado la carne viva de un ser humano.

 

I was now about to form another being of whose dispositions I was alike ignorant; she might become ten thousand times more malignant than her mate and delight, for its own sake, in murder and wretchedness
Capítulo/Chapter XX


había dejado de ser la Elizabeth a la que había querido y amado. Tenía en el cuello la huella asesina del demonio, y el aliento había dejado de salir de sus labios.
(…)
Con una sensación de horror indescriptible, vi en el vano la figura abominable y horrenda del monstruo, que esbozó una sonrisa; parecía burlarse, mientras con dedo diabólico señalaba el cadáver de mi esposa. Me abalancé hacia la ventana y, sacando la pistola de mi pecho, disparé; pero él me eludió, saltó, y corriendo a la velocidad del rayo, se zambulló en el lago.

Capítulo XXIII



         Me abalancé hacia el lugar de donde provenía la voz, pero el diablo consiguió eludirme. Súbitamente, surgió el ancho disco de la luna e iluminó por completo la horrenda y deforme figura que huía con sobrenatural rapidez.

 

I was answered through the stillness of d by a loud and fiendish laugh. It rang on my ears long, and heavily; the mountains re-echoed it, and I felt as if all hell surrounded me with mockery and laughter.

 

I darted towards the spot from which the sound proceded, but the devil eluded my grasp. Suddenly the broad disk of the moon arose and shone full uponhis ghastly and distorted shape as he fled with more than mortal speed.

Capítulo/Chapter XXIV



Prosigue la narración de Walton

12 de septiembre

       “Pero es cierto que soy un miserable. He asesinado a seres encantadores e indefensos; he estrangulado a inocentes criaturas mientras dormían, y he apretado la garganta de quien no me había hecho daño a mí ni a ser humano alguno. He llevado a la desgracia a mi creador”


        “But it is true that I am a wretch. I have murdered the lovely and the helpless. I have strangled the innocent as they slept and grasped to death his throat who never injured me or any other living. I have devoted my creator to misery.”


Con la colaboración del Departamento de Inglés




No hay comentarios:

Publicar un comentario